En este corto cómico, Charley Chase interpreta a un bombero torpe que se topa con un escenario inesperado donde una llamada de rutina se convierte en un striptease juguetón realizado por un personaje femenino. Esta película alegre captura las desventuras de Charley mientras navega a través de situaciones incómodas y divertidas, terminando con la típica payasada al estilo Chase en lugar de contenido explícito, lo que refleja el humor de su época.